El 16 de Agosto de 1936 Lorca es fusilado, acusado de ser Mason, espía ruso entre otras cosas. Su cuerpo, se dice, fue sepultado en una fosa común en el paraje de Fuente Grande, en Alfacar, a 9 Km. de la ciudad de Granada.
En 1954-55 Enrique Amorim viaja por la Unión Soviética y Europa. Cuando volvió a Salto, y al cumplirse 20 años del fusilamiento de Federico, en 1956 Amorim le plantea al entonces intendente de la ciudad de Salto, Armando I Barbieri, la construcción de un monumento a García Lorca. El 8 de diciembre de 1965 se inaugura en nuestra ciudad el primer monumento del mundo en honor de Federico García Lorca, en el que se leen las siguientes palabras de Antonio Machado:
Labrad, amigos, de piedra y de sueño
en la Alhambra, un túmulo al poeta,
sobre donde llore el agua
y eternamente diga:
el crimen fue en Granada.
¡En su Granada!
Junto al monumento, Amorim el día de la inauguración sepulta una extraña caja, blanca, del tamaño de un osario y de la que aun hoy, 56 años después, se desconoce su contenido.
En el año 2009, después de una ardua tarea de excavaciones en el lugar de la fosa común donde estaría el cadáver del poeta y ante la posición de los herederos a la búsqueda, no se hayo ni un solo hueso.
Al final de estas líneas, son más las preguntas que las respuestas.
¿Trajo Amorim los restos de Federico García Lorca a Salto?
¿Qué contenía la caja blanca que sepulto Amorim en el monumento?
¿Está Federico García Lorca sepultado en La Piedra Alta, aquí en Salto?
¿Por qué los herederos de Lorca se oponían a las excavaciones en España?
¿Acaso sabían (o saben hoy) que el poeta descansa en paz, aquí en Salto?
